Se restauran antigüedades

Se restauran antigüedades El deseo de curiosear en cada uno de los puestos y establecimientos de aquella feria le había traído a este lugar. La persona, no muy joven vio el letrero, que generó una idea esperanzada aunque un poco loca. En una casa de fachada de piedra desigual pero bien enfoscada se apoyaba aquel puesto de antigüedades. Una pareja de jóvenes de tez morena y cabellos lisos negro-azabache atendían con diligencia a los clientes y curiosos. En el mostrador herrajes , medidas de madera para grano , vasijas y mil útiles que el tiempo había hecho caer en desuso, llenaban con profusión los mostradores. Justo al lado de los mismos la puerta abierta de la casa tenía una cortina que dificultaba la entrada de las moscas e impedía ver el interior. En una silleta de anea un anciano fumaba un purito delgado . Tocado con un sombrero de paja de ala corta, parecía una antigüedad más. Entre sus piernas un bastón con adornos y flecos de cuero se apoyaba en la mano contr...